Lonja del Comercio de La Habana: los desconocidos orígenes de estos edificios

domingo, 29 de septiembre de 2019

Se construyó en la plaza de San Francisco de Asís, y luego de convertida en el centro de negocios de La Habana colonial, fue el lugar más concurrido por mercaderes y negociantes, es la Lonja del Comercio de La Habana.

Liderada por los arquitectos Tomás Mur, de origen veneciano y el cubano José Toraya Sicre, se comienza a erigir en el año 1907.

La historia de la Lonja del Comercio de La Habana

Corrían los primeros años del siglo XX en La Habana. El desarrollo de los negocios, la actividad mercantil  y las inversiones marchaban en aumento evidente. A la par, se consolidaba la necesidad de concretar un espacio desde el que se pudiera coordinar y estimular el auge comercial con la reunión de comerciantes que se veía en aumento.

Es considerado como uno de los proyectos más importantes de inicios del siglo en nuestra capital, se inauguró el día 28 de marzo de 1909.

¿Cual fue la finalidad de la construcción de la Lonja del Comercio de La Habana?

Debido a la finalidad con que fuera construido, desde sus inicios fue utilizado para su nombre el término lonja, ya que se refiere a un edificio de carácter público que sería utilizado como lugar de negociaciones, contratos, almacenes y bolsa, aduanas y casas importadoras, y comercio.

La construcción de este edificio se realizo sobre el terreno que era propiedad de la familia Arostegui y Armona en su momento. El arquitecto de la obra fue Tomás Mur quien contó con la colaboración del arquitecto José Toraya. El edificio, a su vez,  posee una decoración de arquitectura del renacimiento y cuenta con unas sólidas seis plantas. Su fachada y su estilo renacentista lo hace un edificio muy notable.

En su cúpula se observa la figura de Mercurio, quien es considerado el Dios del Comercio y cuya vista se divisa incluso a la distancia. Tiene un carácter ecléctico y varias referencias icónicas al comercio.

Detalles de las características de la construcción

Sus ornamentos son inspirados por los de las columnas del Palacio de la Señoría en Florencia, Italia. Con el paso de los tiempos, se convirtió en una relevante pieza de la construcción civil debido a que utilizaron en su construcción elementos que se encontraban dentro de los más adelantados tecnológicamente para la época. Como por ejemplo la utilización de hormigón armado y estructuras de acero.

Fue el primer edificio de la ciudad en utilizar elevadores y era el edificio más alto de la ciudad colonial; por lo que fue conocido por décadas el primer rascacielos de Cuba. La singular cúpula con sus claraboyas que se encuentran en la parte superior garantizan la iluminación y ventilación.Su núcleo es un patio central que se encuentra rodeado por los pisos.

Desde su inauguración, se encuentra una escultura del Dios griego del comercio, Mercurio, que cuenta con 4 metros de altura, coronando su domo. Esta escultura identifica la edificación incluso en la distancia.

El Mercurio de La Habana

El Mercurio de La Habana es una copia de la obra del artista escultor  italiano Juan de Bolonia, el cual se conserva en el Museo del Louvre en Francia. Por su alta posición varias han sido las veces en las que se daño debido a los embates naturales, por lo que se restauró en varias ocasiones.

Debido al deterioro del tiempo y el desarrollo el edificio ha sido restaurado en varias ocasiones, en las que se le agregó el 6to piso(originalmente eran 5), modernas oficinas, salones y nuevos y entresuelos. Este sexto piso constituye un ático que cuenta con paredes de cristal en todo lo que es su fachada.

La estructura al momento de su conservación, se dotó con varios adelantos tecnológicos durante la primera rehabilitación capital en el año 1995. Frente a estas obras de restauración estuvo la Oficina del Historiador de la Ciudad y la Corporación Bancaria Española Argentaria.

El edificio de la Lonja del Comercio de La Habana Vieja actualmente

Actualmente es un novedoso complejo de franquicias que acoge a diversas empresas turísticas nacionales y extranjeras; entre ellas la agencia de noticias CNN y la emisora radial Habana Radio.

Igualmente brinda servicios de restaurante y cafetería en su portal. Ademas de unos ascensores panorámicos, los cuales son cuatro en total desde donde se  puede observar el interior del edificio.

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