fbpx
Pinterest

La curiosa historia de este palacete colonial en una de las avenidas mas céntricas de Cuba

El Vedado habanero fue el sitio del cual nunca pudo desprenderse la poeta cubana Dulce María Loynaz. La mayor parte de su vida transcurrió en una gran casona en un palacete colonial de esta barriada y cuando ya fue una reconocida escritora se trasladó a otra donde terminó sus días.



Esta notable y destacada escritora del siglo XX de origen cubano obtuvo el premio de Literatura en el año 1987.

De igual forma el premio Miguel de Cervantes en el año 1992.

Dulce María Loynaz: la más grande escritora cubana del siglo XX. FUENTE: Cuba la isla infinita

Sin embargo, esta casa de su infancia, el hogar de su familia, fue el sitio donde inició su camino en la literatura y como tal marcó sus obras.

Muchos años después, el inmueble todavía conserva aquella aura mística que también rondó la vida de la Loynaz.

En la misma casa situada en la calle Línea, esquina a 14 nacieron todos los hermanos de Dulce María, tres en total.

Se trata de una enorme casona de estilo particular, diferente un poco al resto de las mansiones de esta parte de La Habana.

La casa natal de dulce María hoy en ruinas. FUENTE: cibercuba

Más al estilo chalet campestre, de dos pisos, con enormes habitaciones, un amplio portal y vegetación circundante.

En esos mismos espacios iban las maestras de los institutos de enseñanzas a darles clases particulares a Dulce María y sus hermanos, quienes ya se habían acostumbrado al estilo introspectivo de sus padres, que prefería pagar por sus clases antes que mandarlos a la escuela.

Su padre fue el Enrique Loynaz del Castillo, uno de los Generales del Ejército Libertador en las Guerras de Independencia cubana y por esta razón preferían hacer de sus vidas un ambiente muy privado.

No obstante, a medida que la Loynaz fue adquiriendo dotes en el mundo literario su casa perdió un poco la soledad familiar y comenzó a ser frecuentada por figuras del mundo de las letras.

Nombres tan reconocidos como Federico García Lorca, Juan Ramón Jiménes y Gabriela Mistral entre otros.

Actualmente la casa está convertida en ciudadela y en sus muchas habitaciones conviven por separado familias enteras.

A los 45 años abandonó la casa Dulce María Loynaz para ocupar otro gran palacete en el Vedado, sitio mismo donde hoy se ubica la fundación que lleva su nombre.

Esta es una casona de dos pisos la cual se encuentra conservada.

En ella se encuentra su piano, los muebles aun originales que usaba en vida y una fuente en el patio de esta casona.

Es este espacio se ofrecen diversidad de actividades culturales para el publico que guste de estos temas.

Actual Centro Cultural Dulce María Loynaz. FUENTE: Uva de Aragón – WordPress.com

Escrito por | Redacción TodoCuba

Fuente: Online Tours

Patrocinado por: CubitaNOW - Noticias de Cuba