Músico cubano Abel Lescay denuncia la condena a Fernando Bécquer
martes, 17 de enero de 2023
El joven músico cubano Abel Lescay, uno de los procesados por salir a las calles a protestar el 11 de julio de 2021, manifestó hoy su desacuerdo con la condena a prisión del trovador oficialista Fernando Bécquer, acusado por una treintena de mujeres de abuso sexual.
A través de Facebook, Lescay dijo sentirse muy “mal” desde que Bécquer fue enviado a prisión, algo que se informó la semana anterior, cuando las autoridades revocaron la sentencia inicial por burlarse de las feministas cubanas en la letra de una canción.
“No estoy de acuerdo con que nadie esté preso, menos en Cuba, pues ahí se violan todxs lxs derechxs del ser humano y eso es básico. Menos un cantautor de este país importante para toda una generación y un compositor con al menos más de 5 canciones relevantes y únicas representativas de la música cubana”, refirió.
“Para mí de niño era un placer verlo junto a Berazaín aquí en mi pueblo. Su filosofía me marcó y hoy esto me preocupa. De adolescente le escuché decir, para risotada del público, que el trovador hace canciones para ligar jevitas y quizás esto me marcó”, apuntó.
“Lejos de justificar sus actos y en discordancia total con su actitud (que le hace eso a una de mis hermanas y no sobrevive tan gordo y feo como es) pido que hagamos la cosas con real justicia desde el amor. Y aunque el cochino se haya confundido toda su vida y se haya vuelto a confundir la semana pasada, estemos claros que fue Lis Cuesta la que lo metió preso por un tema absurdamente político”, enfatizó.
El músico se cuestionó dónde estaban ahora los “hermanxs” de Bécquer para defenderlo. “La comunidad trovera se apencó porque hubo un linchamiento en redes. No es mi caso. Mano para arriba el que no quiere que un artista se convierta en presidiario. A mí me lo hicieron y no es bonito”, finalizó.
Sus declaraciones molestaron a activistas y reporteros. “La polarización política te ha segado, como a Lis Cuesta. Yo estoy en contra del punitivismo porque no es solución tampoco a la violencia machista, menos en países totalitarios como el nuestro. Lamento que tú seas una víctima de esa polarización y del punitivismo. Tu afecto por Fernando Bécquer te lo puedes tragar en seco y hacerte cargo de que te gusta la música de un depredador sexual. Quedan más para llorar. Ya casi…”, le respondió, por ejemplo, la activista Marta María Ramírez.
“Depredadores sexuales somos todxs. Sorry. Es nuestra naturaleza. Y así lo ha entendido el arte pop. Llevamos más de 70 años haciendo canciones acerca de depredación y victimización sexual. Solo que Bécquer era feo”, contestó Lescay.
“Ser artista no significa estar por encima del bien y del mal. Tú has sido castigado por hacer el bien. Nada que ver con este asunto. La hermandad de artistas o de varones, que yo defiendo también, no puede estar por encima de la Hermandad. Las mujeres son nuestras hermanas también”, agregó el poeta Rafael Almanza.
“Lescay no quiere que un artista se convierta en presidiario, como si ser artista -que yo creo que es una palabra que a Bécquer le queda grande- fuera una licencia para cometer delitos. Una licencia para violentar. Una licencia para abusar sexualmente de mujeres y traumatizarlas de por vida. Luego Lescay se victimiza, se ofende, porque una de las víctimas de Bécquer le escribe por interno y -según él- lo amenaza. Pobrecito Lescay. Dice que él solo estaba expresando su opinión. Pobrecito”, indicó, por su parte, la periodista Mónica Baró.