Pesca con condón… al cubano se le ocurren cada cosas!!! (+ Fotos)

lunes, 25 de junio de 2018

Aunque pueda parecer mentira los cubanos han encontrado un nuevo uso a los condones que se comercializan en las farmacias: los utilizan como accesorios de pesca.

Así mismo. En el Malecón de La Habana cuando comienza a caer la tarde y el aire comienza a soplar hacia el mar, los pescadores inflan unos cuantos condones, los atan al final de la línea de su caña de pescar y los lanzan al agua, para que la corriente los lleve bien lejos mar afuera, donde se encuentran los peces más grandes.

La llaman “pesca con globo” y se ha vuelto muy popular entre los amantes del anzuelo. Con esta técnica se puede llevar el cebo hasta los 300 metros y, si hay suerte, enganchar algún pargo, gallego, bonito o coronado.

Para evitar que los condones se enreden con la línea, los hábiles pescadores criollos los atan con un hilo de coser que los mantiene apartados del sedal y colocan la carnada viva son dos anzuelos para que no se pierda o se escapen los peces cuando pican…

Es un gran invento, pues a mano nadie podría lanzar a mano tres centenares de metros y los peces grandes están cada vez más lejos de la orilla en una zona de pesca que ha sido sobreexplotada por décadas.

No está claro quién patentó la idea, pero todos coinciden en que el boom comenzó cuando el Gobierno comenzó a perseguir a los que se lanzaban a pescar en medios rústicos como cámaras de camiones o botes de poliespuma.

«A mí me dijeron que alguien vio unos videos de Sudáfrica que usaban papalotes para llevar la línea afuera y se le ocurrió esto»… dice uno de los pescadores de globo que asegura que de esa forma la pesca no sólo es más segura, sino que también es una forma de burlarse de los inspectores que se quedan con las ganas de ponerle 3 000 pesos de multa por lanzarse al mar en una cámara.

Aseguran los que utilizan la pesca con condones que con esta técnica se pueden pescar ejemplares de 20 y 30 libras de peso, lo que es un muy buen negocio en un país rodeado de mar donde un buen pescado como el pargo se llega a pagar a 25 pesos la libra.