Omar Linares, el único «niño» de la pelota cubana

jueves, 3 de octubre de 2019

Cuando hablamos de pelota y los jugadores más importantes de nuestra serie nacional no podemos dejar de mencionar a «El Niño» Omar Linares Izquierdo. Este joven, hijo de Fidel Linares, es considerado por muchos como el mejor pelotero cubano debido a su arte para batear.

Números asombrosos

Linares nació el 23 de octubre de 1967. Con solo 11 años, comenzó su carrera deportiva como corredor de los 60 metros planos. Le apodaron El Niño debido a que se convirtió en titular del equipo Vegueros a nivel nacional con apenas 15 años y asumió dicha posición con la selección nacional cuando solo contaba con 18 años de edad.

Logró el récord de mejor promedio de bateo de por vida con un average de 368, en un total de 20 series, por lo que se considera como un excelente bateador. Se posicionó como el que más carreras impulsó, con un total de 1547; a su vez conectó 404 cuadrangulares, siendo el tercero en esta línea.

En 15 de las temporadas en las cuales jugó promedió a la ofensiva por encima de 300 y sobrepasó la marca de 400 en ocho de ellas. Fue líder de carreras anotadas nueve veces y se mantuvo como líder de bateo en seis ocasiones. Mantuvo así a sus rivales lanzadores en lucha constante.

Linares, El Niño tiene, aún hoy, miles de seguidores y una de las más poderosas razones para el apoyo incondicional de sus fanáticos gracias a su arte para batear, que llevó a su equipo a lograr cinco coronas en Series Nacionales de béisbol y cuatro en Selectivas.

El «Niño» Omar Linares, doble Campeón Olímpico

Tuvo gran relevancia e importancia cuando nuestra pelota obtuvo los dos títulos de los juegos olímpicos que ostenta, el primero en 1992 en Barcelona, España, y luego en 1996 en Atlanta, Estados Unidos. Fue el único pelotero que en estas competencias ha pegado tres bambinazos en un mismo partido.

Ostenta por su excelente desempeño deportivo medallas de oro en seis Campeonatos Mundiales, cuatro en Juegos Panamericanos, tres en Juegos Centroamericanos y del Caribe y seis en Copas Intercontinentales.

Con solo 34 años de edad decidió retirarse de nuestros campeonatos, para la pena de todos sus seguidores, pero nos dejó como legado sus experiencias, su incansable lucha por cada día ser mejor.

Se convirtió así en el ejemplo a seguir para las nuevas generaciones y todos quieren ser como él… como El Niño Linares. Para cerrar con broche de oro, no podemos dejar de mencionar que fue elegido para entrar al Salón de la Fama del Béisbol Mundial.

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