Santiago de Cuba, la única ciudad de la isla donde los taxis tienen dos ruedas

miércoles, 7 de noviembre de 2018

Santiago de Cuba es la única ciudad de la Isla donde los taxis tienen dos ruedas. En la oriental urbe “botean” las motos, una costumbre que no existe en ninguna otra población de importancia dentro del país.

En Santiago las motos están en todas partes. Hay tantas que a los desconocedores de la ciudad les parece en ocasiones que en cualquier momento caerá una bandera a cuadros.

Una gran cantidad funciona como taxi. Son fácilmente reconocibles, porque siempre hay un casco extra colgando del timó. Basta ponérselo, decirle el destino al chofer y este parte de inmediato. No importa la hora, las aglomeraciones, los desvíos o los baches; las motos taxis de Santiago de Cuba están siempre dispuestas.

No existe ninguna tarifa oficial. Si se trata de un turista o de un habanero perdido en Santiago, lo más probable es que termine pagando más que un local; pero un santiaguero suele entender que el precio del pasaje es diez pesos en moneda nacional siempre que sea en el centro de la ciudad. Si los destinos son apartados los precios se disparan y ya depende de la capacidad de negociación del cliente.

A pesar de ser un negocio extendido, las motos taxis operan en la legalidad desde hace poco tiempo. Antes no lo tenían permitido, pero igual lo hacían; así que las autoridades juzgaron prudente entregar la licencia de taxi de “forma excepcional, experimental y con la obligación de que fuera renovada año tras año”.

No existe un tipo exclusivo de motorista entre los que botean en los taxis de dos ruedas. Hay jóvenes desenfadados con desmangadas y short; pero también hombres mayores de pantalón largo y “camisa de cuadros”.

Sin embargo, todos tienen algo en común: Conocen todas las direcciones y recovecos de la ciudad y por una cantidad justa son capaces de conducir a cualquiera al fin del mundo. Siempre que el “fin del mundo” quede dentro de los límites de Santiago de Cuba.