Recorriendo Nuevo Vedado, de barrio obrero prefabricado a una de las zonas mejor cotizadas en La Habana

jueves, 13 de diciembre de 2018

A lo largo de la calle Tulipán, desde Boyeros y hasta la Avenida 26, se encuentra la zona llamada Nuevo Vedado. A la entrada de Tulipán se encuentran los grandes edificios de los Ministerios de Agricultura y Transporte. Este es un lugar tranquilo, de poco tránsito de personas, rodeado de árboles que ofrecen sombra y fresco a los transeúntes.

En este barrio casi todas las estructuras son realizadas con hormigón prefabricado y cuenta con un agromercado, organopónicos, invernaderos y pequeñas extensiones de tierra que son cultivadas, y los frutos y hortalizas que nacen de estos son vendidos a los habitantes del lugar.

La urbanización parece como un pueblo modelo. Existen varios supermercados, tiendas en divisas, tiendas de productos orgánicos, un dentista, cajeros, bancos, casas de cambio, un veterinario, un hotel, un gimnasio y disímiles cafeterías particulares.

La característica principal que distingue a Nuevo vedado de las otras zonas habaneras es la presencia de imponentes edificios que poseen 12, 14 y 20 plantas. Los proyectos arquitectónicos se realizaron con un diseño antisísmico y están realizados para acoger aproximadamente a 500 personas. En la década de los años 70 y a inicios de los 80 fueron construidos, ya que el gobierno necesitaba satisfacer una alta demanda de viviendas familiares.

La arquitectura de estos edificios es socialista europea y cada uno era patrocinado por el Ministerio de las Fuerzas Armadas (FAR) o por el Ministerio del Interior (MININT), por el Ministerio de Trabajo y Seguridad Social (MTSS), el de la Industria básica o el Ministerio de Transporte.

Hubo una época durante la cual habitaban en estos bloques multifamiliares obreros, los cuales trabajaban en el mismo centro laboral, al menos la mayoría. Luego de que se aprobaran las leyes que flexibilizaron los negocios privados, muchos de estos apartamentos son rentados a personas ajenas o a cooperativas.

Hace pocos años ha despertado este barrio el interés de las personas radicadas en otros lugares, ya que es un barrio muy bonito y en extremo tranquilo y ofrece una seguridad y comodidad inigualables para los que en él habitan.