La lanchita de regla: un viaje lleno de emociones

lunes, 2 de octubre de 2017

Si de seguir embrujado con los encantos de La Habana se trata, un paseo en la «Lanchita de Regla» te aportará mucho. Hay quienes dicen que es allí donde se le piden los más entrañables deseos a los santos, dejando caer alguna que otra moneda al agua; otros, por otro lado, que es el método más rápido de llegar hasta Regla. Sea cual sea el punto de vista, son muchos quienes lo asumen como una experiencia única.

Lo cierto es que que hoy la realidad de este paseo es muy diferente. Los que no visitan la habana durante algún tiempo y llegan hoy hasta el El Emboque de Luz, lugar donde inicia el recorrido, se percatarán que el cambio ha sido significativo.

Cubierta por una fachada de cristal y justo frente a la Bahía habanera, se muestra esta instalación que cuenta con dos plantas. La primera funciona como muelle desde las 4 AM hasta las 11:30 PM. La segunda, por su parte, sirve de cafetería-mirador y permanece abierta durante las 24 horas del día, con un servicio en doble moneda. Entre las características más novedosas, el nuevo local tiene asientos, teléfonos, cajeros automáticos, baños y cafeterías.

Un medio de transporte eficiente

La Lanchita de Regla es una de las formas de transportarse más famosas, rápidas, baratas y eficientes de la bahía de La Habana, Capital de Cuba y también uno de sus principales símbolos. Este increíble paseo permite viajar desde la Habana Vieja, que ya conocemos como centro histórico de la ciudad, hasta el municipio Regla. ¿Lo mejor de todo? cruzar la bahía toma solamente 5 minutos.

Lo más encantador de este paseo, y que llama la atención de las personas, es la hermosísima vista al mar y de la ciudad que se puede presenciar durante el recorrido. Además, también son famosas las historias relacionadas con la custodia de la Virgen de Regla a estas aguas.

De otra manera, viajando por tierra, en el denominado anillo que circunda la ciudad, el recorrido hacia ambos territorios demoraría media hora o incluso más tiempo, especialmente en los horarios pico en los cuales se congestiona todo el trasporte de la ciudad.

El viaje en la lanchita de regla

La frecuencia de cada viaje hacia Regla o Casa Blanca es de 15 minutos o menos y cada 30 se produce uno entre los dos poblados. A las 4:00 am sale la primera lanchita y la última a las 12 am. La capacidad de estas es de 90 personas. Dentro de ese número de personas, se permite que hasta 30 de ellas se monten con sus bicicletas, aunque con frecuencia el número admitido es mayor.

El precio del viaje es de 10 centavos de peso cubano CUP (2 centavos en CUC, la moneda libremente convertible). Como podemos observar, es el más barato que puede pagarse, pues en los ómnibus colectivos es de 40 centavos (8 centavos CUC) y 20 pesos (0,80 CUC) en los taxis particulares o almendrones, como se llama a los autos americanos de la década del 50 que garantizan buena parte de la transportación en la ciudad.

A pesar de lo barato y el corto trayecto del viaje también existen una serie de medidas a cumplir por quienes deciden hacer el trayecto. En primer lugar, está terminantemente prohibido transportar motocicletas y bicicletas con motor de combustión interna, efectos electrodomésticos, recipientes de cristal de más de 200ml, triciclos, animales (salvo peces y aves ornamentales), envases con combustible líquido o gaseoso, residuos de comida y tanquetas. Tampoco se puede abordar luego de haber ingerido bebidas alcohólicas.

De cualquier manera, el solo hecho de sentir el sonido de las olas y la brisa fresca de la bahía de La Habana hacen que este paseo sea inigualable. Asimismo, es una perfecta opción de recreación para los niños, adolescentes, y para aquellos que quieran pedir la bendición al Santuario de Virgen de Regla.

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