El Mural de las Personalidades, el sitio perfecto para un selfie en La Habana Vieja

martes, 19 de marzo de 2019

Quien llega por primera vez a La Habana y desea tomarse una foto que represente el lugar donde está, probablemente vaya hasta el Capitolio o la Catedral. Sin embargo, muy cerca de allí podrá encontrar un sitio también significativo y donde se reúne una representación de la intelectualidad colonial cubana, durante el siglo XIX. Se trata del llamado mural de las personalidades, en la famosa y concurrida calle Mercaderes.

Una auténtica pieza de arte, concebida por el diseñador Andrés Carrillo, cuyo trabajo de selección de las personas representadas fue absolutamente riguroso.

El mural tuvo su inauguración hace casi dos décadas, en el año 2000, y hasta ahora, cada espacio de los 300 metros cuadrados de pared ocupada se encuentra intacto.

En los 52 paneles que lo conforman, usted puede elegir retratarse con una sola de estas personalidades, o con las 67 representadas.

Si conoce bien la historia de Cuba podrá encontrar allí una imagen exacta, a tamaño real de: Manuel María de Mendive, el conocido profesor de José Martí; Gertrudis Gómez de Avellaneda, la célebre poeta cubana; José de la Luz y Caballero y Félix Varela, dos de los más importantes intelectuales y pensadores de la etapa colonial cubana; Cirilo Villaverde y José Jacinto Milanés, también escritores y hasta científicos de entonces como el destacado Felipe Poey.

Este curioso mural fue levantado sobre un desaliñado muro de piedra que no hacia más que afear el aspecto de uno de las calles más comerciales y turísticas del centro histórico de La Habana Vieja.

El material utilizado para su construcción solo ha sido utilizado en Cuba en este espacio y posee una textura de piedra natural que se prepara mediante un tipo de grano que simula la arena al que se le imbuye una resina acrílica.

Su resistencia y durabilidad a la interperie hace que los cuatro colores utilizados para su confección, los cuales se obtuvieron de una gama de tonalidades de 13 tintes, den un acabado perfecto en los detalles de las personalidades escogidas para «dibujar».

Dadas las características simbólicas de la obra y lo que ella vendría a representar, el sitio escogido para su emplazamiento fue escogido el inmueble que en el siglo XIX sirvió de sede al Liceo Artístico y Literario de La Habana, también conocida la edificación como Palacio del Marqués de Arcos.

Es así que se trata al mismo tiempo de un homenaje al pensamiento en aquellos tiempos y sus legados a la contemporaneidad.

Un especie que en medio de la bulla citadina de este siglo parece detenido en el tiempo.

El trabajo de este llamado el Mural De las Personalidades en La Habana finalizo en el año 2000 un 27 de Diciembre.

La superficie de esta obra de arte es de aproximadamente 300m² en su totalidad.

Para la realización de este gran trabajo que le cambió el aspecto a esta zona de La Habana, participaron en conjunto: Nicolás Ramos Guiardinú, quien fue el escultor; Jaime Rodríguez quien fue el arquitecto y diferentes estudiantes  de San Alejandro y otras instituciones.

Este mural en su conjunto representa un homenaje a la historia cubana, por lo que una foto en este lugar sera de seguro un gran y apreciado recuerdo.