Isolina Carrillo, la cubana a la que inmortalizaron Dos Gardenias

lunes, 21 de mayo de 2018

Dos gardenias para ti, con ellas quiero decir te quiero, te adoro, mi vida… Así comienza una de las canciones más célebres de la historia de la música cubana. Fruto del genio creador de la cantautora, compositora y música Isolina Carrillo es quizás uno de los boleros más interpretados y versionados del mundo.

Isolina Carrillo quien nació en La Habana el 9 de diciembre de 1907 fue uno de esos diamantes en bruto de la música. Con apenas 10 años de edad ya trabajaba como pianista suplente de la orquesta de Calixto García Allende en el cine Strand, animando las funciones silentes. Luego tocaría también en el Hisperia y en el Favorito.

Su trabajo lo alternaba con las clases que tomaba en el Conservatorio Municipal de La Habana, donde aprendió los primeros rudimentos académicos que luego puliría con el maestro Rafael Palau en la Catedral de La Habana.

Genio musical, Isolina Carrillo dominó el piano, el órgano, la guitarra y el tres. Además sus aptitudes como directora de orquesta le permitieron crear un septeto: Las Trovadoras y otras agrupaciones musicales.

Su voz espectacular se la disputaron las emisoras de radio de la República y ya, consolidada en el medio creó en la RHC Cadena Zul una orquesta gigante de danzones. Su amplio repertorio como cantantes se desplazó por el bolero, el tango, la guaracha y otros géneros.

Los contratos le llovieron fuera de la Isla y así paseo su arte por Venezuela, Panamá, Puerto Rico, República Dominicana, Buenos Aires, Montevideo, Santiago de Chile, Lima y México.

Fue precisamente en México donde le concedieron en 1952 el Premio Ariel por haber mantenido su canción Dos Gardenia en la preferencia del público por más de dos años consecutivos.

Pero su legado mayor es haber sobrevivido en la preferencia del público de todos los tiempos a través de Dos Gardenias, una de esas canciones que bien pueden ser clasificadas como inmortales.