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La desconocida historia de Juan Bautista Osorio, el mambí que quiso llevar la Guerra de Independencia al mar

Desde el mismo inició de la Guerra del 68, Carlos Manuel de Céspedes se interesó por la posibilidad de crear una marina de guerra mambisa que hostigara a los españoles en el mar e interrumpiera su tráfico comercial. Una vez convertido en presidente ofreció patentes de corso a los cubanos o extranjeros que armaran buques contra los colonialistas. Aunque los intentos en este sentido fueron pocos, de corta duración y desgraciados, algunos existieron, como el de Juan Bautista Osorio que el 23 de marzo de 1869 tomo por asalto el vapor de pasajeros Comanditario para convertirlo en corsario.



Por esta acción, el presidente Céspedes le expidió un diploma con el grado de Capitán de Fragata del Ejército Libertador cubano, lo que le convirtió en el único mambí en ostentar esa jerarquía en las tres guerras por la independencia de Cuba.

Juan Bautista Osorio había nacido en Puerto Príncipe, Camagüey en 1847 y provenía de una de las familias más acomodadas de la villa. Ingresó en la marina española y en ella alcanzó el grado de alférez.

El 23 de marzo de 1869, de acuerdo con un grupo de jóvenes cubanos, tomó por asalto el vapor Comanditario que realizaba la travesía La Habana – Cárdenas para armarlo en corso y llevar la guerra contra España al mar. En Bahamas, donde se abastecieron de carbón izaron la bandera de la estrella solitaria y rebautizaron el buque como Yara.

Sin embargo, los trabajos por abastecer el Yara se demoraron más de lo previsto y los barcos de guerra españoles enviados en su búsqueda lo rodearon, por lo que los patriotas no tuvieron más remedio que abandonarlo y dirigirse a los Estados Unidos para ponerse a las órdenes de la emigración.

Desde la emigración el capitán de fragata Juan Bautista Osorio dirigió varias expediciones a Cuba, exitosas unas, que terminaron en desastre otras. El 1ro de julio de 1871 fue capturado en un cayo del norte de Camagüey junto al general Federico Cavada y condenado a ser colgado de los palos de una cañonera por piratería. Cuando se disponían a cumplir la sentencia a un marinero español muy nervioso se le escapó un disparo que alcanzó al mambí en la cabeza provocándole la muerte.

Así dejó de existir el primer mambí que intentó crear una marina de guerra para luchar por la independencia de Cuba.

Escrito por | Redacción TodoCuba

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