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Si viaja a La Habana y desea comer bueno, barato y con calidad siga estos consejos

Si usted considera que come muy bien en su casa o ciudad, es posible que posea un paladar difícil de satisfacer. La comida familiar pasa por hábitos y costumbres heredados o impuestos que forman un gusto particular por determinados platos, sabores específicos, una decantación culinaria a favor de los platos que conocemos de toda la vida.



Viajar es aventura, abrir el apetito al conocimiento cultural. En diferentes países podemos encontrar una cocina que nos apetezca o no, pero tal elección depende de nuestra educación, nuestra forma de vida y nuestra cultura.

La gastronomía cubana posee larga data. Fruto de una variada mezcla de culturas, ha sido ganadora de olimpiadas de cocina y múltiples premios internacionales. Sus platos emblemáticos están presentes en la mayoría de los restaurantes y paladares de La Habana.

En los últimos treinta años La Habana ha inaugurado cientos de restaurantes o paladares en aras satisfacer la creciente demanda turística. Al visitante lo reciben con los platos emblemáticos de su gastronomía. Pero comer bien en la Habana, como en cualquier ciudad, requiere un mínimo de conocimiento del entorno. He aquí algunos tips fundamentales.

En los últimos treinta años La Habana ha inaugurado cientos de restaurantes o paladares en aras satisfacer la creciente demanda turística

Sobre la cocina cubana

Las grandes cocinas de Cuba, son la del campesino y la del pescador. Con los siglos ambas fueron conquistando los paladares más exquisitos hasta imponerse en todas las capas sociales. El origen humilde de esa culinaria provoca que cada plato tenga variadas formas de confección según la zona del país. Por ejemplo, no es lo mismo un congrí oriental que uno habanero.

El arroz en la mesa de cubano

El arroz lo trajeron los españoles a Cuba y de toda la herencia hispana es el plato que más hondo ha calado en la cultura culinaria cubana. Sea arroz blanco, el preferido, o arroz amarillo, arroz frito, arroz congrí, moros y cristianos o el muy popular arroz con… (lo que tenga: cerdo, pollo, pescado, embutidos, camarones, vegetales…) el arroz no puede faltar en la mesa del cubano.

Las grandes cocinas de Cuba, son la del campesino y la del pescador

Evite el menú dirigido

Cuando se viaja en grupo muchas veces nos vemos sujetos a los menús dirigidos, donde todo marcha previamente organizado y pagado en aras de un itinerario a cumplir. Esta modalidad no sólo nos limita las posibilidades de selección, sino que corremos el riesgo de que nos repitan platos similares en cada sitio al que llegamos.

Si bien el arroz blanco con frijoles negros, el congrí con pollo o el cerdo asados y la ropa vieja son los embajadores de la gastronomía cubana, estar una semana sin variación en el menú puede llegar a cansar y sobre todo hacernos una idea equivocada de la cocina autóctona que es mucho más amplia y variada.

Evite los lugares vacíos

Puede que muchos lugares lo seduzcan por su apariencia o entorno, puede que los camareros, desde la puerta, lo inviten a entrar con amabilidad, pero si el lugar está vacío o tiene pocos comensales, dude. Los restaurantes y paladares más solicitados, por lo general, son muy concurridos, incluso en algunos se hace fila. Esos son los mejores.

Pero comer bien en la Habana, como en cualquier ciudad, requiere un mínimo de conocimiento del entorno

Prefiera las paladares

En Cuba existen dos tipos de restaurantes, los estatales y los particulares, más conocidos como «paladares». El estado administra lugares emblemáticos como El Floridita, La Bodeguita del Medio o La Torre, por citar algunos, pero también de muchos otros de calidad variable. Por lo general los mejores restaurantes estatales los encontramos en los hoteles. Sin embargo, las paladares, por lo general, mantienen el exquisito cuidado de su dueño, ofreciendo un mayor rigor en el diseño, la atención y por supuesto en la calidad de la oferta.

Muchas paladares han alcanzado celebridad mundial por la importancia de sus visitantes. Robert de Niro cenó durante toda una semana en «La Guarida» por considerar maravillosa su comida. En ella celebró su cumpleaños Madonna y los reyes de España se encuentran en la larga lista de comensales célebres.

Un amigo en La Habana

«Quien tiene un amigo tiene un central.»  Esa frase cubana ejemplifica que lo mejor para el viajante es tener un amigo en la ciudad. Puede ser su casero, su chófer o su guía, su masajista o su profesor de salsa. Puede ser también alguien que conoció en sus recorridos por el país. El cubano es muy amistoso y se brinda con gusto para socorrer, ayudar o recomendar los mejores restaurantes o paladares, sugerir los platos más apreciados de su cocina, y no se sorprenda si él mismo se los confecciona.

Muchas paladares han alcanzado celebridad mundial por la importancia de sus visitantes

Disfrute la comida cubana estilizada

Una de las oportunidades más atractivas de La Habana es la posibilidad de disfrutar platos con calidad gourmet a precios asequibles. Chef graduados en importantes escuelas de todo el mundo prestigian los mejores hoteles y paladares habaneras.

Además, se ofrece la posibilidad de disfrutar platos tradicionales de la cocina cubana de forma estilizada. Delicatessen que nos sorprenden por su alto grado de exquisitez. Destacan la ropa vieja, el ceviche, el chilindrón, el arroz congrí o los casquitos de guayaba, todos en una versión inolvidable.

Propóngase entonces hacer turismo culinario en la capital, descubra una de las mejores cocinas del mundo, en el acierto de la sencillez y lo exquisito. Siga las pautas que le recomiendo y de seguro que no se arrepentirá.

Escrito por | Redacción TodoCuba

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