Aprende a aprovechar la carambola, esa exótica y dulce fruta que se extiende por los campos de Cuba

jueves, 9 de agosto de 2018

La carambola es una fruta exótica que poco a poco se ha ido extendiendo por toda Cuba. Procede de Indonesia y Malasia y se ha vuelto popular en la decoración de algunos platos porque al practicársele un corte transversal adquiere una original forma de estrella.

Amén de esta simpática característica, la carambola posee propiedades alimenticias y medicinales que hacen recomendable su consumo.

Aporta vitaminas A y C, lo que es muy útil pues sirve de sucedáneo para los que no toleran los cítricos el pimiento u otros vegetales (que son la fuente casi exclusiva de vitamina C en la alimentación). También se recomienda su consumo a los precisan una dieta baja en grasa y aquellos que estas “súper nutridos” (que es la forma políticamente correcta de decir “gordos”).

Esta fruta también presenta cantidades importantes de potasio, un mineral necesario para el correcto funcionamiento de los sistemas nervioso y muscular, a la vez que interviene en el equilibrio del agua a nivel celular.

Además de vitaminas A, C y potasio, la carambola sólo contiene pequeñas cantidades de hidratos de carbono simples, proteínas y grasas, por lo que su valor calórico es muy bajo. No alimenta… pero es espectacular para las dietas. Su fibra es rica en oxalato de calcio lo que la hace divina para los que padecen de estreñimiento porque funciona como un laxante natural.

Ahora, esta última propiedad la hace poco recomendable para los que padecen cualquier tipo de litiasis, cualquier tipo de enfermedad renal, gastritis y trastornos gastrointestinales.

El color amarillo – anaranjado de la fruta anuncia su madurez. En ese estado es dulce y refrescante y se recomienda consumirla lo más fresca posible. Sin embargo, también se pueden elaborar, jugos, mermeladas y dulces que también quedan muy buenos.

La carambola recibe otros nombres fuera de Cuba: en Venezuela se le llama “tamarindo chino” o “tamarindo dulce”; en Brasil “caramboleiro” o “carambolero”; en Costa Rica “tiriguro” y en República Dominicana “cinco dedos”.