Influencer cubana Flor de Cuba reivindica su pasado y la educación de su hijo tras críticas en redes sociales

viernes, 25 de julio de 2025

Flor de Cuba, conocida influencer de origen cubano, se convirtió recientemente en el centro de una polémica en redes sociales después de ser blanco de comentarios despectivos acerca de su vida y la influencia sobre su hijo. Lejos de responder con hostilidad, Flor optó por una reacción que demostró no solo su fortaleza personal sino también el vínculo especial que comparte con su hijo mayor.

A través de un video publicado en sus perfiles sociales, Flor permitió a sus seguidores escuchar una conversación telefónica íntima con su hijo de 11 años. Durante la charla, ambos abordaron asuntos como programación, física cuántica y, especialmente, valores humanos. Aunque los temas académicos eran de interés, lo que más llamó la atención fue la sinceridad y el afecto del niño al afirmar que no cambiaría a su madre por ninguna otra, especialmente por la admiración que siente al verla superar el consumo de drogas y reinventarse. “Tengo el privilegio de tener una mamá que fue capaz de salir de las drogas y salir adelante”, expresó él.

La influencer aprovechó el momento para compartir con orgullo el desarrollo de su hijo, un joven que ya destaca por su pasión por la informática desde temprana edad, que busca conocimiento con profesores universitarios, es aficionado al ajedrez y muestra convicciones cristianas fuertes, como leer la Biblia y mostrar gratitud en su día a día.

En respuesta al seguidor que intentó desprestigiarla, Flor fue contundente: aseguró que su hijo no solo posee conocimientos y habilidades apreciables para su edad, sino también principios y madurez, señalando directamente que no todos podrían tener conversaciones tan profundas con sus propios hijos. Según sus palabras, «un hijo suyo no podría tener una conversación fluida de 10 minutos con un hijo mío… Usted sí es una vergüenza como padre y como ser humano”.

Remarcó además, con total honestidad: “¡Y sí! Es el hijo de la adicta… Que sobre todo me ama, me respeta, me entiende y me acepta”.

La publicación generó una ola de respaldo por parte de su comunidad digital, que elogió la capacidad de superación de Flor y su estilo de crianza basado en la conciencia, el respeto y el amor. Muchos vieron en su postura un ejemplo de dignidad que sirve de respuesta a los prejuicios contra quienes luchan para transformar su vida y la de sus familias.