Crece la incertidumbre sobre el futuro de Diván y Sailly Francisco tras señales de distanciamiento en redes

martes, 22 de julio de 2025

Recientes movimientos en redes sociales han puesto en el centro de la atención la posible crisis sentimental entre el popular intérprete cubano Diván Sotelo Soto y Sailly Francisco Casas, su pareja y madre de sus dos hijos. El cantante, radicado en Miami desde finales de febrero de 2025, se ha mantenido alejado tanto físicamente como en el plano digital de Sailly, quien permanece en La Habana junto a los niños.

La especulación sobre una posible ruptura no ha hecho más que crecer luego de que se detectara que Sailly ha dejado de seguir a Diván en Instagram. Aunque él mantiene el follow a su esposa, Sailly únicamente sigue cuentas de admiradores del músico, sin incluir el perfil oficial del artista en sus contactos.

Paralelamente, Diván ha eliminado de sus publicaciones en redes todas las imágenes familiares tomadas en Cuba, borrando así cualquier huella digital de su pasado junto a Sailly y sus hijos.

Estos indicios adquieren relevancia luego de la aparición de Diván en el pódcast Destino Tolk, donde fue consultado sobre la actriz Paula Massola, una de sus parejas anteriores. El artista evitó profundizar sobre esa relación, insistiendo en que su prioridad era la familia y expresando su deseo de reunir a Sailly e hijos con él en Estados Unidos: “Soy una persona muy familiar, muy cercano a las personas que me quieren. Vamos a trabajar con base a que ella venga para acá”.

La relación sentimental entre Diván y Sailly, iniciada en 2021, solía proyectar una imagen de estabilidad y unión en las plataformas digitales, donde ella -modelo e influencer- tenía una presencia constante. Sin embargo, el distanciamiento geográfico y la ausencia total de interacciones públicas han sembrado dudas entre quienes siguen a la pareja, alimentando rumores de conflicto o separación definitiva.

Hasta el momento, ninguna de las partes ha querido aclarar públicamente la situación ni ofrecer comentarios al respecto, manteniendo el misterio sobre el presente de su vínculo.

En una era donde los gestos digitales pueden ser interpretados como declaraciones oficiales, seguidores y medios permanecen atentos a cualquier indicio que confirme o desmienta el desenlace de esta historia que ha captado la atención tanto dentro como fuera de Cuba.