Tras un grave episodio de salud mental, Chocolate MC permanece aislado en prisión y sufre presuntos abusos

martes, 29 de julio de 2025

El artista urbano cubano Yosvanis Arismin Sierra Hernández, conocido como Chocolate MC, atraviesa un crítico momento en la cárcel Turner Guilford Knight (TGK) del condado Miami-Dade tras un aparente intento de suicidio que culminó con su reclusión en una celda de castigo, según declaraciones brindadas por su pareja, Yelena Ramírez, al canal Univision.

Ramírez relató que fue contactada por un oficial del centro penitenciario, quien le notificó que el músico fue hallado en condiciones preocupantes, con una sábana atada al cuello. Según la joven, la situación casi le cuesta la vida y las autoridades intentaron manejar el caso bajo total hermetismo, llegando incluso a eliminar todo rastro del paradero de Chocolate MC en los registros penitenciarios.

«Al buscar información, no aparecía en ninguna parte, como si hubieran optado por ocultarlo», manifestó Ramírez. Además, denunció que el reguetonero estaría siendo víctima de golpizas diarias, pasando hambre y sin posibilidad de contacto con el exterior. Otro dato alarmante aportado por la pareja del cantante fue la dificultad incluso para que su abogado tenga acceso fidedigno a su ubicación dentro de TGK.

La situación fue parcialmente confirmada mediante un mensaje que Chocolate habría conseguido enviar a Yelena con ayuda de otro preso, en el que expone los tratos a los que está siendo sometido. Hasta la fecha, persiste la incertidumbre sobre si está recibiendo atención médica o psicológica acorde a la gravedad del episodio.

Este suceso ocurre en el contexto de los antecedentes de salud mental del artista, quien en reciente entrevista telefónica desde prisión admitió haber sido diagnosticado desde la niñez con dos trastornos psiquiátricos, y que antes de su carrera musical ya había necesitado atención especializada e internamiento en una clínica.

Familiares y allegados continúan reclamando transparencia en el proceso y garantías mínimas de derechos para el reguetonero, cuya situación ha generado alarma tanto por el secretismo de la prisión, como por las condiciones denunciadas dentro del sistema penitenciario estadounidense.