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Reguetoneros Dany Ome y Kevincito El 13 modifican su agenda en Santiago de Cuba tras controversia y presión del exilio

En medio de una creciente polémica impulsada por miembros del exilio cubano y figuras críticas del régimen, los músicos urbanos Dany Ome y Kevincito El 13, ambos establecidos en Estados Unidos, tomaron la decisión de reprogramar su anticipado espectáculo en Santiago de Cuba. Esta reacción surge luego de que su participación en el evento político-cultural “Todo X Santiago”—auspiciado por instituciones estatales y encabezado por Juan Guillermo Almeida (JG), hijo del fallecido comandante Juan Almeida Bosque—fuera señalada por sectores del exilio como un acto contradictorio para artistas protegidos por la libertad en territorio estadounidense.



La información fue inicialmente confirmada por el periodista independiente Yosmany Mayeta Labrada, quien detalló que los reguetoneros optaron, a última hora, por no presentarse el sábado 26 de julio en la Tarima de la Alameda, fecha central de la actividad organizada como parte de las festividades oficiales del carnaval santiaguero. Dicha iniciativa, con fuerte respaldo gubernamental, pretendía dar brillo a la celebración en medio del contexto económico y social adverso del país.

Sin embargo, la suspensión del concierto no obedeció a dificultades de logística sino al efecto de las campañas y mensajes de activistas, personalidades e influencers que abogaron por que los cantantes se mantuvieran al margen de eventos asociados de forma directa al aparato propagandístico del Estado cubano. Incluso, desde algunos sectores se sugirió que se investigara el estatus migratorio de los artistas en Estados Unidos debido a sus vínculos con el evento.

Como respuesta a la presión pública y en un aparente movimiento para desmarcarse de la carga política del evento, Dany Ome y Kevincito El 13 anunciaron que su presentación será ahora el domingo 27 de julio en el «Rumbón Mayor», utilizando el mismo escenario pero fuera del programa comprometido con el oficialismo. Además, la noche antes realizarán un show en el bar restaurante St. Pauli en la popular calle Enramadas, un local que ha decidido distanciarse de las actividades principales organizadas por las autoridades culturales. El acceso a este espectáculo tiene un precio de 7,500 pesos cubanos, y sus propios trabajadores han manifestado su inconformidad con la gestión oficial, alegando incumplimientos contractuales, restricciones operativas y recorte de horarios, condiciones que han impactado negativamente en los ingresos del lugar.

“Esto ya no es un carnaval, es un funeral cultural con timbales de cartón”, comentó un empleado del local a Mayeta Labrada, ilustrando el ambiente generalizado de desánimo durante las fiestas de este año.

Este episodio pone en evidencia cómo las autoridades buscan aliviar la tensión social con espectáculos, mientras la debilidad de la propaganda oficial se hace más visible en un escenario de crisis y descontento. La determinación de Dany Ome y Kevincito El 13 de apartarse del evento político genera precedente, evidenciando la compleja relación entre la cultura popular, la presión política y la responsabilidad de figuras públicas, sobre todo cuando estos artistas disfrutan de las libertades y ventajas migratorias que ofrece Estados Unidos.

Escrito por | Redacción TodoCuba

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