Ron Isla del Tesoro, el que Fidel Castro gustaba regalar a sus amigos

lunes, 25 de junio de 2018

El ron Isla del Tesoro, que se produce en la Ronera Santiago de Cuba – en la ciudad del mismo nombre donde comenzara la leyenda de los Bacardí – tiene dos características que lo hacen atractivo para muchos: primero, su singular presentación en un cofre de madera rústico, similar al que usaban los piratas y corsarios que merodeaban el Caribe y, segundo, el hecho de ser el que prefería obsequiar el expresidente cubano Fidel Castro a sus amigos más cercanos.

Aunque se comenzó a producir en la década de 1960, el Maestro del Ron Cubano, Julio Ayán asegura que desde el principio se destinaba como un regalo para las personas que disponía Fidel Castro. Esto lo rodeó de misteriosa fama hasta hace cuatro años cuando la empresa cubana Cuba Ron SA recibió el permiso para colocar en el mercado un número limitado de botellas.

Tan bueno es el ron Isla del Tesoro que cuando se presentó en 2016 y 2017 en el Instituto del Sabor en Bruselas obtuvo en las dos ocasiones tres medallas de oro por su aroma, su sabor y su aspecto; único producto de esas características que puede presumir de semejante resultado.

Isla del Tesoro es un ron excepcional con una presentación también excepcional: la botella es alusiva a las que se lanzaban al mar en tiempos de corsarios y piratas y se coloca dentro de un cofre lleno de arena para que semeje la llegada de un mensaje a la playa.

Aseguran los que conocen de ron en Cuba que ninguno supera al que se produce en Santiago de Cuba, donde varias generaciones de maestros roneros han desarrollado las mezclas que añejan en barriles de roble blanco por casi cien años.

Rones como el Isla del Tesoro así lo atestiguan y llevan más allá del mar el sabor inigualable de las bebidas espiritosas que se fabrican en Cuba.