fbpx

Mulas, el pueblito cubano donde los políticos han tenido que salir corriendo después de dar sus discursos en la plaza publica

Al nororiente de Cuba, existe un singular pueblecito donde la gente, de todas la generaciones, han sido, son y serán como se dijera vulgarmente en la calle “de chupa y déjame el cabo”.



Este pueblecito es conocido por el nombre de Mulas. Tradicionalmente y durante todos los años de su existencia, los oradores han sido considerados como los enemigos de estos iracundos pobladores, los cuales sienten una profunda animadversión por todo aquel que se atreva a subirse a una tribuna.

El primer orador que fue víctima del pueblo fue un político que llegó a Mulas prometiendo de todos cuanto se le ocurría, durante una campaña electoral. Poco tiempo después de su llegada sus seguidores habían improvisado una tribuna hecha con cuatro tablas y palos.

Luego de subir a lo que hacía la función de estrado, el orador recorrió con la vista la conglomeración de los habitantes del lugar, los cuales no estaba acostumbrados a que nada sucediera y era llamada su atención con lo más mínimo. Su discurso comenzó con las palabras “¡Hijos de Mulas!” y resultó ser que ahí mismo había terminado ya que los pobladores al sentirse muy ofendidos fueron detrás del hombre, el cual según cuentan tuvo que correr durante un largo tramo huyendo de la turba de guajiros que, armados de machetes, querían que pagara por la ofensa dedicada a sus progenitoras.

El segundo orador que fue víctima del pueblo llegó advertido de lo que había sucedido con anterioridad al primero. Este venía armado con una singular proposición, la que resultó ser la propuesta de cambiar e nombre del pueblo de Mula a Palmira, debido a la proliferación de palmas en la zona.

Los habitantes de este pueblo ignoraban que Palmira significa Ciudad de Palmeras, que así mismo era llamado una antigua ciudad Siria, sin embargo, lo que si era del conocimiento popular se trataba de una ramera que cerca de allí ejercía su profesión y esta, se llamaba Palmira.

Es así que cuando desde la tribuna, propuso el cambio de nombre, le fue devuelto una negativa generalizada ya que preferían que los llamaran Hijos de Mulas antes de Hijos de Palmira.

Escrito por | Redacción TodoCuba

Patrocinado por: CubitaNOW - Noticias de Cuba