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Liseta frita, el plato que hizo famosa a la ciudad de Manzanillo

Si un plato distingue a la oriental ciudad de Manzanillo es la liseta frita. Durante las últimas décadas del siglo XIX y la primera mitad del XX todo el que llegaba a la urbe tenía que pedir un plato de ese pescado.



¿La explicación? Sencillo. Frita en aceite de oliva, la liseta, que tiene muy pocas espinas es un plato delicioso. Más si se acompaña con una ración de casabe que sirve para recoger la grasa y atemperar su sabor marino.

Cierto que parecía poco elegante comer con las manos, pero pocos podían resistirse. La liseta, además, al otro día de cocinada se podía comer con arroz amarillo y no perdía nada. Así que para las fondas servir lisetas era el negocio del siglo.

Decían en Manzanillo que se debía comer la liseta, pero no su cabeza, porque aquel que se atrevía a hacerlo se veía condenado a estarla comiendo por el resto de sus días.

El “inventor” de la liseta frita se dice que fue un español de nombre Juan González Sánchez, al que todos llamaban «Juan Singandella». Este nació en 1824 en Oviedo y emigró a Cuba, donde se estableció en Manzanillo. Allí construyó un quiosco de dos plantas que semejaba una pagoda china. En la planta baja vendía liseta frita y en la alta vivía, para no perderle ojo al negocio.

Este quiosco estaba situado en la misma entrada del puerto, por lo que tuvo mucho éxito y las lisetas fritas de Juan Singandella se hicieron famosas en toda Cuba, pues los viajeros paraban en él frecuentemente para echarle algo a la barriga y se aficionaron al plato.

Fue Juan Singandella el que inventó lo de la cabeza de la liseta para promocionar su producto, eslogan que con el tiempo hizo suyo el pueblo de Manzanillo y se convirtió en refrán popular.

Finalmente, tras haber vendido pescado a diestra y siniestra, Juan Singandella se murió en 1910 a la edad de 85 años. El puesto siguió existiendo por muchos años en manos de sus herederos que siguieron vendiendo lisetas fritas, hasta que estas se convirtieron en un símbolo de la ciudad de Manzanillo.

Ingredientes

  • 12 lisetas
  • 1 Pizca de pimienta molida
  • 4 Limones
  • 1/2 Taza de harina de trigo
  • 1/2 Tazas de aceite
  • Sal al gusto

Elaboración

Limpie las lisetas de vísceras, escamas y agallas y sazónelas con sal, pimienta y jugo de limón; déjelas reposar 20 min. Pasado este tiempo, séquelas en harina de trigo y fríalas en aceite bien caliente 5 min por cada lado aproximadamente. Deben quedar crujientes desde la cabeza hasta la cola.Sírvalas acompañadas de tajadas de limón. Las lisetas son muy típicas en las provincias orientales, sobre todo en la zona de Manzanillo, donde siempre hubo este hábito de consumo.

Escrito por | Redacción TodoCuba

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