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Decir Baracoa es decir chocolate

Baracoa es la patria del chocolate en Cuba. Allí en el extremo más oriental de la geografía isleña, a casi mil kilómetros de La Habana, se procesa todo el chocolate que se produce en el país.



José Alexander Urgellés, un mulato indiado como tantos baracoenses, ha dedicado toda su vida a trabajar en el que, con justicia, llamaban los aztecas «el alimento de los dioses». Su padre fue fundador de la planta procesadora y en ella dio José Alexander sus primeros pasos como trabajador. El chocolate es tradición para su familia: «Yo me puedo dedicar a otra cosa, pero esto para mi es todo», expresa con orgullo.

Aunque el cacao no desembarcó en el siglo XIX cubano por Baracoa sino por Santiago de Cuba, fue la Primada la que acabó por convertirse en la patria del chocolate en la Isla, pues allí fue donde encontró las temperaturas más favorables y los suelos más propicios.

Para los que trabajan en la industria chocolatera en Cuba el trabajo es duro y complejo. Requiere esfuerzo y trabajar por turnos para que la fábrica no se detenga en las 24 horas del día.

En la planta las semillas de cacao se tuestan a temperaturas de 150 grados Celsius, un paso que es inviolable, pues de él depende el aroma y el sabor del chocolate. Luego se descascaran y se muelen.

Con una gigantesca prensa de 500 Kg se le extrae la grasa que se conoce como “manteca de cacao” y que contienen los granos en más del 50 %. Luego estas tortas secas y compactas se muelen para obtener el polvo de cocoa que es la base para la elaboración de las exquisitas confituras que se fabrican en Baracoa.

Entre estas confituras las que más gustan y gozan de prestigio en Cuba son las tabletas (conocidas como peters en la Isla) y los bombones; pero también se manufacturan natillas y chocolate en polvo para mezclar con leche.

La actual fábrica de chocolate de Baracoa trabaja con tecnología suiza e italiana – que sustituyeron recientemente a la que por décadas hizo trabajar a la planta y que estaba completamente obsoleta – Esta modernización duplicó la capacidad productiva que era sólo de tres mil toneladas al año.

 

Escrito por | Redacción TodoCuba

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