Conoce la Placita de Santo Tomás

jueves, 12 de abril de 2018

A simple vista puede parecer un parque más, como cualquier otro parque, con bancos, locetas, árboles, luminarias, el obelisco en recordación a los caídos,  y un muro circundante.

Sin embargo, La Placita de Santo Tomás  de Santiago de Cuba es más que un parque adonde se va a descansar, conversar o coger fresco,  por lo que guardia de historia y los ejemplos  que encierra.

En  La Placita se reunían parejas de enamorados para declararse un amor que podría unirlos para siempre; adolescentes que  medían su fuerza y energía  en juegos como las carreras o el béisbol, aunque  con pelotas de goma -experiencia que recuerdo bien-;  y revolucionarios que compartían  sus sueños.

Allí concibieron y compartieron sus ideas libertarias jóvenes como Frank y Josué País, Otto Parellada, José (Pepito) Tey, Tony Alomá, Salvador Pascual, Floro Vistel,  y  otros que derramaron su sangre en nombre de la fidelidad a sus ideas.

Como para homenajear ese  lugar de historia, y en una continuidad diferente, como diferente es esta época, todos los días sus predios se llenan de  colores de los uniformes de los estudiantes que van  al parque a ejercitar sus músculos, después de sus tareas en las aulas.

La Placita es un retablo de héroes que  siguen viviendo en las generaciones actuales de santiagueros.