La olvidada historia de Jacques Lagas, el piloto chileno que combatió en Bahía de Cochinos por Fidel Castro que terminó exiliado en Miami

martes, 2 de octubre de 2018

Una larga lista de colaboradores de Fidel Castro han renegado de él. Algunos con bombos y platillos tras décadas de haberle servido bien; otros de forma callada y anónima. A estos últimos pertenece el piloto chileno Jacques Lagas, quien alcanzó el grado de capitán de la Fuerza Aérea Rebelde y combatió a la Brigada 2506 en Playa Girón piloteando un B-26.

Jacques Lagas nació en Iquique, se hizo marino, socialista y por último piloto comercial. En Estados Unidos aprendió a pilotear un B – 26 y al enterarse de que en Cuba, donde acababa de triunfar la Revolución de 1959 – se trasladó a la Isla donde lo contrataron como instructor.

Estuvo dos años preparando a los pilotos cubanos y se le otorgó el grado de capitán y al producirse el ataque de la Brigada 2506 el 17 de abril de 1961 se puso a las órdenes del mando. A pesar de que no estaba previsto que volara, ante la muerte de dos pilotos y el cansancio de los otros sus jefes le autorizaron a pilotear un B – 26 y atacar a las fuerzas invasoras en Playa Girón. Durante las misiones que realizó bombardeo la cabeza de playa y derribó un B – 26 enemigo.

Al igual que otros pilotos fue felicitado por el propio Fidel Castro, consciente que sin el aporte de la aviación le hubiese sido imposible liquidar el ataque de la Brigada en el tiempo en que lo hizo.

Sin embargo, esto no significó un ascenso en su carrera, pues en la misma medida en que se reforzaba la alianza entre La Habana y Moscú, él y los que expresaban opiniones distintas eran apartados de las principales responsabilidad y estas eran asumidas por los hombres fieles del PSP.

Desilusionado con el proceso se entrevistó con Fidel Castro, con quien se quejó de los abusos que sufrían los viejos rebeldes por los comunistas. Este le escuchó atento, pero se limitó a ofrecerle una casa y un automóvil y sugerirle que se “fuera de vacaciones”.

Finalmente, a finales de 1962 decidió abandonar Cuba para siempre. Regreso a Chile con su esposa cubana y sus dos hijos (que terminarían emigrando a Miami) y buscó empleo en una pequeña compañía de aviación.

Nueve años después, el 25 de mayo de 1971, al Curtis C – 46 en que trabajaba como copiloto le falló una hélice y se precipitó a tierra. Jacques Lagas fue rescatado con vida tras el aterrizaje forzoso, pero falleció poco después a consecuencia de las heridas y quemaduras.

Su muerte fue reflejada por toda la prensa chilena, pero ignorada por completa en Cuba. Lagas, aunque profundamente decepcionado, nunca renegó públicamente de Fidel Castro. Pero este igual lo condenó al olvido.