Tres animalitos cubanos con record Guinness

martes, 4 de julio de 2017

El libro británico de los records Guinness registra en sus innumerables páginas varias entradas dedicadas a cubanos, pero sabían que también la fauna de la Isla se ha ganado su espacio entre ellos.

Una rana escapada de las páginas de Gulliver

En la reserva de la biosfera Cuchillas del Toa, reconocida a nivel mundial por la exuberante fauna y flora de carácter endémico, habita una pequeña especie que pudo pasearse entre los habitantes de Liliput sin que ninguno de sus enanos la notase. Se ha ganado su marca absoluta como el anfibio más pequeño del mundo y lleva por nombre científico Eleutherodactylus iberia pero la región donde habita la ha bautizado como Ranita de Monte Iberia. Esta frágil miniatura viva mide entre 9.0 y 10.5 milímetros, colocándola como una de las maravillas del reino animal. En las mañanas prefieren refugiarse bajo los abundantes helechos de la zona, donde como una especie de coro de anfibios se unen para crear una sinfonía de chirridos. Prefiere la noche para moverse bajo la hojarasca en busca de alimento. Aunque unos científicos norteamericanos descubrieron hace algunos años una ranita de apenas 7.7 milímetros de longitud la cubana al menos mantendrá el record en el corazón de los cubanos.

La vaca que de clonarla hubiese abastecido al mundo

Increíble resulta pensar que una vaca pudiera estar inscrita en las páginas de las marcas absolutas, pero sí una vaca cubana lo logró. En los laboratorios de genética animal cubanos nació Ubre Blanca, un ejemplar vacuno obtenido del cruce de las razas Holstein y la Cebú. Mucho cubanos recuerdan las páginas de la prensa cubana que se llenaron de halagos por los 109.5 litros de leche obtenidos en tres ordeños el 16 de enero de 1982. Este mismo animal computó un total de 24 268.9 litros en 305 días. Sus proezas vacunas jamás habían registrado igual en la historia de la ganadería mundial, ya que cuando un animal de este tipo alcanza los 30 litros de leche en 24 horas se considera toda una hazaña. Con el objetivo de obtener óvulos para estudios posteriores se le sometió a un tratamiento hormonal que le agudizó una tumoración en la piel causada por los rayos solares y se decidió sacrificarla. En un documental de Enrique Colina algunos entrevistados narran que hasta seguridad y lista de pases con acceso restringido existía para poder ver la vaca en vida. Para homenajearla se sometió su cuerpo a un proceso de taxidermia y se colocó, cual muñeco de feria, en el vestíbulo del Centro Nacional de Veterinaria. Como si esto fuera poco se perpetuó su memoria con una escultura de mármol blanco en la Isla de la Juventud, a la que le han mutilado algunas partes a través del tiempo.

El pajarito que las moscas consideran pequeño

Una minúscula especie que podría ser aplastada por la fuerza de un aplauso vive en los campos cubanos. La avecilla multicolor, endémica del archipiélago cubano, se ganó su espacio en el libro de los Guinness como el animal con plumas más pequeño de mundo. El colibrí zunzuncito, conocido como el elfo de las abejas, no supera los seis centímetros de longitud y los dos gramos de peso. Por su tamañito es confundido muchas veces con cierto tipo de abejorros. Su nido no rebasa los tres centímetros de diámetro, y también podía ser incluido en las páginas de los records por ser el menor de los construidos por aves. Los huevos puestos por este animalito no superan las dimensiones de un grano de café. Es capaz de sacudir sus alas hasta 200 veces por segundo en su etapa de apareamiento pero su frecuencia de aleteo normal es de 80 veces por segundo. Los que han tenido lo suerte de verlo han notado como permanece en el aire en la misma posición durante un tiempo prolongado y este se debe a la velocidad de sus alas. Es capaz de succionar el néctar en las flores sin necesidad de apoyarse para hacerlo. Estas cosas, que ya parecen únicas, no serían sus características inigualables, a mi entender creo que sería uno de los plusmarquistas del reino animal en cuanto a detalles impares. Es el ave con menor cantidad de plumas, posee uno de los ritmos cardiacos más rápidos del reino animal y su temperatura corporal ronda los 40 grados Celsius, ubicándola como la más alta entre todos los alados. Así que la próxima vez que tengan la suerte de ver uno piensen que tienen un recordista mundial delante y deléitense viendo como un Record Guinness actúa para usted.