¡No te quedes sin visitar el Orquideario de Soroa!

lunes, 9 de mayo de 2016

Existen muchos jardines botánicos alrededor del mundo, pero pocos gozan de la fama y el reconocimiento que tiene el Orquideario de Soroa en Cuba, ya que este lugar es de visita obligatoria para todos aquellos que aman a la naturaleza por su exquisita colección de orquídeas, y la forma en la que está distribuido todo para el paseo.

El Orquideario de Soroa es también conocido bajo el nombre del Jardín de las Orquídeas de Cuba, y se encuentra ubicado en las montañas de la Sierra del Rosario en Pinar del Río, en un valle reducido que se encuentra a unos 200 metros de altura, y que es atravesado por el río Manantiales.

Microclima único y especial

Este valle ubicado en Soroa, fue escogido especialmente por el microclima que domina la zona, y por su vegetación original, para la creación de un hermoso jardín botánico que estuviese centrado, de manera principal, a las orquídeas tropicales.

Este jardín fue construido durante el año de 1943, por la mano de Tomás Felipe Camacho, quien era un abogado de las canarias; al principio, sólo se trataba de una casa de descanso en donde el dedicó toda su atención para cultivar las flores, especialmente las orquídeas, las cuales eran las plantas favoritas tanto de su esposa como de su hija y que, desafortunadamente, habían fallecido de manera reciente.

Con el tiempo este orquideario no sólo se convirtió en el mayor jardín de orquídeas de Cuba, sino también en uno de los más importantes jardines botánicos dedicados a las orquídeas en el mundo entero, ayudando, de esta forma, a las diversas investigaciones que se dedican para estudiar y conservar las diferentes especies de orquídeas cubanas.

Vistas espectaculares

El Orquideario de Soroa no sólo es un sitio de investigación, sino que también es un lugar donde los visitantes pueden pasear para deleitarse y conocer más de estas hermosas y frágiles flores, sin olvidar que alrededor del orquideario se encuentran diversas instalaciones afines que resultan interesantes y, además, ayudan a hacer agradables las visitas al aprovechar la belleza natural de la zona.

Estas instalaciones comprenden desde una serie de miradores increíbles, diferentes senderos para la observación, ríos, saltos de aguas, ruinas de antiguos cafetales, diversas edificaciones antiguas y, afortunadamente para los turistas, lugares de recreación y hospedaje.

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